Ángel Ramírez, un valiente miembro del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), fue víctima de un asesinato en La Dolorita, según informó Douglas Rico, director de la institución policial, a través de una publicación en Instagram.
La víctima, un joven de 25 años de edad, había estado recibiendo amenazas de muerte por parte de delincuentes locales debido a su labor como detective en el Cicpc. Lamentablemente, estas amenazas se materializaron y se cobraron la vida de Ramírez.
Los presuntos responsables de este crimen han sido identificados como Edwar, Brayan Ramírez (conocido como Chupata) y Enderson (alias el Cachorro). Estos individuos son conocidos en la zona y ahora enfrentan graves acusaciones relacionadas con el asesinato del funcionario del Cicpc.
Este trágico incidente pone de manifiesto la peligrosa realidad a la que se enfrentan a diario los miembros de las fuerzas de seguridad en su lucha contra la delincuencia. La valentía y dedicación de Ramírez al servicio de la justicia no deben pasar desapercibidas, y su pérdida es profundamente lamentada tanto por sus compañeros como por la comunidad en general.
Es fundamental que las autoridades realicen una exhaustiva investigación para llevar a los responsables ante la justicia y que se implementen medidas concretas para prevenir futuros actos de violencia en La Dolorita y sus alrededores. Este triste suceso debe ser un llamado de atención para fortalecer nuestras instituciones de seguridad y trabajar de manera conjunta en la construcción de un entorno seguro y pacífico para todos los ciudadanos.
La memoria de Ángel Ramírez perdurará en nuestros corazones, y su sacrificio nos inspira a redoblar los esfuerzos para garantizar la seguridad y protección de aquellos que arriesgan sus vidas en beneficio de la comunidad. Es momento de unirnos en contra de la violencia y trabajar en pro de una sociedad en la que la justicia prevalezca sobre la impunidad.